23 de septiembre de 2006

Casa Pipa en Villaviciosa

Villaviciosa se está convirtiendo poco a poco en el concejo con más chigres y restaurantes interesantes por habitante. Tazones y mariscos aparte, cada vez hay más sitios curiosos, con cocina moderna, platos con descripciones curradas y cartas de vinos muy cuidadas.

Sólo mencionar dos sitios que conozco de primera mano: La Bolera del Peque y Casa Pipa. De La Bolera no puedo concretar mucho porque fui hace tiempo (corría el año III A.G., esto es, Antes de Gourmateur ;-), pero recuerdo la gratísima impresión que me dejó por todos los aspectos importantes de un restaurante: local, precio, calidad y atención al cliente (no necesariamente por este orden).

A Casa Pipa fui hace poco, recomendado por el impronunciable FMMO, que podrá corroborar y matizar mis apreciaciones. Me encantó la personalidad del local, es un comedor cuadrado y diáfano, sin tabiques ni recovecos, decorado de la forma más ecléctica que te puedas imaginar con pinturas, pósters y figuras de multitud de estilos: un paisaje tipo-Cezanne al lado de "algo" que recuerda a Miró, pegado a un par de bocetos que parecen de Picasso, junto a una litografía que uno diría de Chillida... y todo así, salpicado por todas partes de trabajos artísticos de -creo- la madre de la señora que ahora lleva el restaurante. Pero ya se sabe que el todo es más que la suma de las partes, porque el conjunto resulta muy acogedor, y eso cuando estás en un restaurante vale más que cualquier crítica de arte de tres al cuarto -que en eso se está convirtiendo esta crónica.

De lo que importa de verdad, sólo puedo hablar maravillas, por variedad, calidad y originalidad, especialmente en las entradas. Como éramos sólo dos, con la idea de probar la mayor cantidad de cosas posible optamos por pedir sólo entradas: revuelto de morcilla con manzana (impresionante), foie fresco con pisto (sin palabras) y cachopines en salsa (sorprendentes, porque eran de carne asada en lugar del típico filete, aunque no a la altura del resto). De postre, una maravilla casera a base de chocolate.

Evidentemente, el precio no es el de un McDonald's: salimos a unos 50 Euros la pareja, sin pasarnos con el vino (un Cune Crianza a 10 Euros la botella). Pero merece la pena.

Para la ficha tésnica:

Restaurante Casa Pipa
c/ Pedro Pidal Arroyo, 8 - Bajo (según entras en la Villa, a mano derecha, en dirección a San Salvador de Valdediós)
Tfno. 985 890 259

3 comentarios:

FPM dijo...

Pues yo estuve anoche y cenamos de maravilla. De entrada una ensalada de pitu caleya con una salsa deliciosa. Y yo, una merluza con muselina, extraordinaria. De postre helado de la casa con chocolate negro.
Tomamos cerveza, y con el café, nos salió a 22 €. Una ganga y una maravilla.
Y la atención de Cuqui, insuperable.
El sitio respira personalidad y estilo por los cuatro costados.
¿Qué más puedo decir? Que la vida es más agradable gracias a una cena como la de anoche.
FPM.

Tito y familia dijo...

Fué la primera vez que visitaba este restaurante, pequeñito y con un encanto especial que le diferencia del resto de establecimientos al uso.
La amabilidad y el buen trato estan presentes permanentemente y la calidad y variedad de platos llenan a todos.
Excelente por todos los conceptos. repetiremos, seguro.

Antonioi dijo...

He estado varias veces en el restaurate, y seguire mas veces cuando sea posible.
El ambiente es original y acojedor
La cocina magnifica, diria extraordinaria y con exquisita personalidad.
Quien tenga la oportuinidad de tomar su MENESTRA, no lo olvidara nunca.
Cuqui siempre nos atendio con afecto y jamas dando la lata.
Y debo decir que alli tuve, comidad familiares, de negocios y de amigos; en todos los casos un exito.